Estimadas familias, hoy 24 de marzo, es
un día para valorar nuestros derechos como ciudadanos. Por ello, recordamos Día
Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia.
El 24 de marzo de 1976, un grupo de militares -respaldado por un grupo de la sociedad y de medios de comunicación- derrocó al Gobierno de Isabel Perón poniendo fin a un gobierno democrático elegido por el pueblo. Fue uno de los momentos más triste y oscuro de nuestra historia que, todavía hoy, constituye una herida abierta en la sociedad.
Así, se da inicio al capítulo más sombrío de nuestra historia, en el que fuimos despojados de nuestros derechos, libertades, e incluso identidad. La sociedad se vio sumergida en el miedo, la desconfianza y, lo peor, en la indiferencia al decir: “no es mi problema”.
Este régimen tuvo como objetivo reinstalar un orden. Que implicaba acabar con los grupos guerrilleros los cuales ya, para ese entonces, estaban casi extintos. Este período se denominó Proceso de Reorganización Nacional donde comenzó un plan sistemático de secuestro, desapariciones forzadas, tortura y muerte a estudiantes, profesionales, gremialistas y todo aquel que se opusiera gobierno de facto.
Además, la economía fue destruida. Se priorizó el ingreso de productos extranjeros sobre la producción nacional, acumulando una deuda externa que llevó a una crisis económica y social. Fue una guerra sin sentido que sólo trajo más muerte y dolor a la sociedad. Cuando arrasaron con todo y no pudieron seguir sosteniendo este régimen dieron paso a la Democracia.
Por todo lo que pasó, está prohibido olvidar y se debe comprender que sólo la Democracia es la única que puede resguardar y garantizar los derechos esenciales de los seres humanos. Únicamente así podemos asegurarnos que hechos como estos nunca más van a volver a suceder en nuestro país.
Maestra de 7° Yoana Ibañez
El 24 de marzo de 1976, un grupo de militares -respaldado por un grupo de la sociedad y de medios de comunicación- derrocó al Gobierno de Isabel Perón poniendo fin a un gobierno democrático elegido por el pueblo. Fue uno de los momentos más triste y oscuro de nuestra historia que, todavía hoy, constituye una herida abierta en la sociedad.
Así, se da inicio al capítulo más sombrío de nuestra historia, en el que fuimos despojados de nuestros derechos, libertades, e incluso identidad. La sociedad se vio sumergida en el miedo, la desconfianza y, lo peor, en la indiferencia al decir: “no es mi problema”.
Este régimen tuvo como objetivo reinstalar un orden. Que implicaba acabar con los grupos guerrilleros los cuales ya, para ese entonces, estaban casi extintos. Este período se denominó Proceso de Reorganización Nacional donde comenzó un plan sistemático de secuestro, desapariciones forzadas, tortura y muerte a estudiantes, profesionales, gremialistas y todo aquel que se opusiera gobierno de facto.
Además, la economía fue destruida. Se priorizó el ingreso de productos extranjeros sobre la producción nacional, acumulando una deuda externa que llevó a una crisis económica y social. Fue una guerra sin sentido que sólo trajo más muerte y dolor a la sociedad. Cuando arrasaron con todo y no pudieron seguir sosteniendo este régimen dieron paso a la Democracia.
Por todo lo que pasó, está prohibido olvidar y se debe comprender que sólo la Democracia es la única que puede resguardar y garantizar los derechos esenciales de los seres humanos. Únicamente así podemos asegurarnos que hechos como estos nunca más van a volver a suceder en nuestro país.
Maestra de 7° Yoana Ibañez
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